En lo que son opciones de almacenamiento, la GIGABYTE 990FX Gaming luce bastante tradicional ya que aquí sólo apreciamos seis puertos SATA III (6.0Gbps) que para nuestro gusto son suficientes aunque si lo comparamos con una motherboard LGA1151 podríamos decir que se quedan un poco cortas.
Donde la GIGABYTE 990FX Gaming también brilla es cuando hablamos de opciones de expansión ya que incluye tres slots PCIe x16 3.0 y dos PCIe x1 3.0. En este caso los dos primeros slots (PCIe 3.0 x16) trabajan en modo x16/x18 y soportan arreglos multi-GPU como AMD 2/4-way CrossFireX y NVIDIA 2/4-way SLI, mientras que el tercero trabaja en modo x4.
Pero lo verdaderamente llamativo del asunto es que los tres slots PCIe 3.0 x16 están reforzados con una cubierta metálica Ultra Durable PCIe. Su finalidad es está diseñado para añadir mayor solidez para soportar tarjetas de video que son pesadas y así evitar accidentes. Esto sin mencionar que también añaden un toque adicional de estética.
Otra razón por el que la GIGABYTE 99FX Gaming sobresale de la mayoría de modelos AM3+ que hay en el mercado, es porque también incluye un conector M.2 (2242/2260/2280) que hasta ahora es comúnmente visto en motherboards LGA1151 para procesadores Intel “Skylake”.
Para hacerlo posible, el conector M.2 está conectado directamente al Southbridge AMD SB950 y puede soportar velocidades de transferencia de hasta 20Gb/s. De esta manera vamos a poder instalar unidades de sólido (SSD) tipo SATA y hasta PCIe x4.
Poniendo la vista al fondo de la motherboard nos encontraremos algunos headers (o conectores) que darán vida a seis puertos USB 3.0 que están conectados al Southbridge AMD SB950 y otros USB 3.0 adicionales que usan controlador VIA VL805. También se aprecia un conector adicional de 3-pines para ventilador y un conector para sacar provecho de funciones de seguridad mediante el Trusted Platform Module (TPM).
Los días cuando el audio integrado era considerado lo peor han quedado en el pasado. Para demostrarlo, la motherboard GIGABYTE 990FX Gaming también viene equipado con la Tecnología AMP-UP de audio mejorado que también es otra de las características clave que encontramos en motherboards LGA1151 para procesadores Intel.
La novedad del audio mejorado AMP-UP consiste en que incluye un juego de prestaciones ‘especiales’ mediante las cuales el gamer puede disfrutar de sonidos más realistas que se traducen en una experiencia más envolvente cuando se juega, se ve una película o se disfruta de música.
Par esto, el circuito de audio está dividido del resto de la motherboard por una franja denominada Audio Noise Guard que protege las señales de audio y soporta los efectos de iluminación Ambient LED. En adición se cuenta con un codec Realtek ALC1150 protegido con una capa metálica que soporta un SNR de 115db y se usan capacitores de grado profesional.
Todo esto nos lleva al panel I/O trasero que viene acompañado de una o dos novedades. La primera de ellas es que la motherboard incluye un puerto USB 3.1 Type-C con diseño reversible y un puerto USB 3.1 Type-A lo cual es posible mediante un controlador ASMedia USB 3.1.
En adición tenemos otros dos puertos USB 3.0 (azules) y cuatro USB 2.0 (negros). Pero lo que también vamos a encontrar son otros dos puertos USB 3.0 (amarillos) que están diseñados especialmente para entregar la mejor calidad de audio. Su característica es que incluyen un conversor USB DAC-UP que sirve para aislar las variaciones de voltaje y así poder asegurar la mejor experiencia posible.
Y en vista que la motherboard está dirigida a gamers, GIGABYTE también ha incluido un puerto LAN que usa un controlador Killer E2200 que está optimizado para entregar el mejor rendimiento y reducir latencias mientras se juega en línea.